VILLA VEGVISIR

VILLA VEGVISIR, ubicada en SantAngelo, Benalmádena, se concibe como una integración entre la arquitectura contemporánea y la topografía natural del terreno, ya que aprovecha la pendiente existente para organizar plataformas exteriores a distintos niveles, generando recorridos dinámicos y zonas de estancia que se abren progresivamente hacia el paisaje. En el acceso, se encuentra un aparcamiento descubierto, dispuesto sobre una superficie pavimentada y acompañado de zonas ajardinadas que suavizan la transición entre lo urbano y lo natural. Desde este punto, el visitante percibe ya el carácter mediterráneo de la vivienda gracias al uso de materiales nobles: la madera en paramentos verticales y detalles, la piedra en muros de contención y revestimientos, y la pintura blanca que otorga luminosidad y continuidad estética, dialogando con la arquitectura tradicional andaluza.

En el extremo opuesto de la parcela se ubica la piscina infinity, concebida como un mirador sobre el mar, reforzando la sensación de elevación y amplitud. En torno a ella se despliegan porches cubiertos que actúan como extensiones del interior, destinados a comedor exterior, áreas de descanso y espacios de relax, todos ellos enmarcados por un panorama privilegiado.

El interior de la vivienda se organiza en tres niveles: El Sótano está concebido como un espacio diáfano y flexible, pensado para albergar diferentes funciones según las necesidades de sus ocupantes: gimnasio, sala de ocio, almacenamiento o un taller. Al ingresar en la planta baja se sitúa un baño de uso práctico y discreto. Desde allí, el recorrido conduce al amplio salón-comedor, espacio vertebrador que conecta visual y físicamente con la cocina. Esta última se dispone estratégicamente junto a los porches exteriores, facilitando el tránsito interior-exterior y potenciando la vida al aire libre. La escalera en U nos conduce hasta la planta primera, donde un generoso distribuidor, que adquiere valor propio como espacio versátil de uso secundario (zona de lectura, estudio o estar). Este nivel se completa con un baño amplio, un vestidor independiente con acceso exterior y dos dormitorios de gran tamaño, ambos conectados con terrazas privadas que maximizan la orientación óptima y las vistas hacia el mar y el entorno.

En conjunto, la vivienda se plantea como una arquitectura que dialoga con el relieve y que articula la vida interior y exterior de manera equilibrada. La selección de materiales, la claridad volumétrica y la disposición de espacios exteriores en distintos niveles refuerzan la sensación de continuidad entre la casa, la naturaleza y el paisaje mediterráneo con la intención de crear una experiencia que englobe cada espacio de esta.